Spain Introduces New Tax on E-Cigarettes and Related Products

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El 21 de diciembre de 2024, el gobierno español publicó la Ley 7/2024, que introduce un nuevo impuesto sobre los líquidos para cigarrillos electrónicos y otros productos relacionados con el tabaco (el «nuevo Impuesto»). Esta ley forma parte de un paquete más amplio de medidas que también incluye un Impuesto Complementario para cumplir con la directiva Pilar Dos de la UE sobre tributación mínima corporativa y un Impuesto sobre el margen de intereses y comisiones de determinadas entidades financieras.

Si bien la Ley 7/2024 inicialmente estableció que el nuevo Impuesto entraría en vigor el 1 de enero de 2025, el gobierno posteriormente aprobó el Real Decreto-ley 9/2024 el 23 de diciembre, que pospuso la entrada en vigor hasta el 1 de abril de 2025. Este retraso tiene como objetivo proporcionar a empresas y consumidores más tiempo para comprender y prepararse para las nuevas obligaciones impuestas por la regulación.

La aprobación de este nuevo Impuesto responde a la naturaleza evolutiva del sector. Con la aparición de nuevos productos no directamente cubiertos por la Directiva 2011/64/UE sobre la estructura y tipos del impuesto especial aplicado al tabaco manufacturado, tanto el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) a nivel comunitario como diferentes Estados miembros en relación con sus regulaciones locales han tenido que recurrir a interpretaciones teleológicas para tratar de equiparar la tributación de estos nuevos productos con los productos tradicionales del tabaco.

Alcance del Nuevo Impuesto

El nuevo Impuesto cubre los siguientes productos:

  • Líquidos que, con o sin nicotina, pueden utilizarse en cigarrillos electrónicos o dispositivos similares de vaporización o para recargarlos. Se consideran cigarrillos electrónicos los productos que pueden utilizarse para el consumo de vapor a través de una boquilla o cualquier componente de ese producto, incluido un cartucho, depósito y el dispositivo en sí, que puede ser desechable o recargable (mediante depósito o cartuchos de un solo uso).
  • Productos de administración oral que contienen nicotina pero no tabaco, mezclados con fibras vegetales o sustrato equivalente, presentados en bolsita o bolsas porosas o formato equivalente; o cualquier otro producto de nicotina que no contenga tabaco.

El nuevo Impuesto aplicará las siguientes tarifas:

Para un usuario promedio de cigarrillos electrónicos que consume aproximadamente 3 ml de líquido por día, el nuevo Impuesto añadirá unos 60 céntimos por día de uso. Asumiendo que vapea todos los días, esto supone alrededor de €219 más al año debido al Impuesto.

Administración y Cumplimiento

El Ministerio de Hacienda ha aprobado dos nuevos formularios fiscales para gestionar este Impuesto. El Formulario 573 permitirá a los contribuyentes autoliquidar el Impuesto, mientras que el Formulario A24 facilitará la devolución del Impuesto para productos enviados a otros países de la Unión Europea.

Los fabricantes, distribuidores y otros operadores económicos relacionados con estos productos deben registrarse en el censo de empresarios y en el registro territorial del Impuesto antes de iniciar sus actividades sujetas al Impuesto. Se deben presentar autoliquidaciones mensuales, teniendo los contribuyentes hasta los primeros veinte días de cada mes para declarar y pagar los importes correspondientes al mes anterior, siempre que haya devengos.

Disposiciones Transitorias y Objetivos

Para facilitar la implementación del Impuesto, se han incluido disposiciones transitorias. Por ejemplo, los operadores ya activos tendrán un plazo de treinta días hábiles para registrarse después de la entrada en vigor del Impuesto. Además, las liquidaciones de enero, febrero y marzo de 2025 podrán presentarse conjuntamente en abril.

El objetivo principal del nuevo Impuesto es regular el consumo de estos productos y reforzar el marco fiscal en línea con los impuestos especiales tradicionales, como el que grava los productos del tabaco. Según el Ministerio de Hacienda, la medida responde a criterios de proporcionalidad y seguridad jurídica.

Conclusión

El nuevo impuesto sobre cigarrillos electrónicos en España representa un cambio significativo para la industria del vapeo y los consumidores. Al gravar los líquidos para cigarrillos electrónicos, las bolsas de nicotina y otros productos relacionados, el gobierno pretende regular el consumo y alinear la tributación de estos productos con los impuestos tradicionales sobre el tabaco.

Los fabricantes, distribuidores y minoristas deberán revisar cuidadosamente la nueva ley y asegurarse de cumplir con los requisitos de registro y presentación de informes. Para los consumidores, el Impuesto significará un aumento notable en el costo del vapeo, con un usuario promedio pagando potencialmente más de €200 al año.

A medida que la industria del vapeo continúa evolucionando, es probable que veamos más cambios regulatorios y fiscales en España y en toda la UE. Encontrar el equilibrio adecuado entre la salud pública, la elección del consumidor y una tributación justa será un desafío continuo para los legisladores en los años venideros.

Matthew Ma
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